Preocupación en Cataluña por el alto porcentaje de ciudadanos que renuncian a recibir atención médica por los elevados costes. Según el informe de la organización. Oxfam, el 24% de la población catalana ha renunciado a los tratamientos dentales y el 11% a las sesiones con un psicólogo porque no pueden afrontar los costes. Estas cifras representan un grave problema de exclusión social y económica en la región.
El estudio, publicado el pasado jueves, refleja la situación de más de un millón de catalanes que no pueden acceder a los servicios básicos de salud por falta de recursos. El informe también señala que el sistema sanitario español «no protege a las personas más vulnerables ni garantiza una atención médica equitativa».
La realidad es que, cada vez más, el acceso a los servicios médicos se ha convertido en un lujo para muchos ciudadanos. La principal causa es la crisis económica que ha golpeado duramente a España y ha dejado en una situación precaria a gran parte de la población. Los recursos financieros destinados a la atención médica han disminuido y los ciudadanos se ven obligados a elegir entre cubrir sus necesidades básicas o invertir en su salud.
Pero ésta no es una situación exclusiva de CataluñaSegún Oxfam, en toda España el 30% de la población ha dejado de recibir atención médica por motivos económicos. Un dato preocupante que revela la falta de políticas sociales efectivas en el país.
El informe también señala que los recortes en el sistema sanitario afectan especialmente a las personas más vulnerables, como los mayores de 65 años, los parados y los inmigrantes en situación irregular. Estos grupos se encuentran en un limbo en el que no pueden acceder a la atención sanitaria pública ni pagar un seguro privado.
La situación es especialmente alarmante en lo que respecta al cuidado dental. Según el estudio, el 24% de los catalanes no ha visitado al dentista en los últimos 12 meses. Esto no sólo afecta a la salud bucal, sino que también puede tener graves consecuencias en la salud general de las personas, ya que una mala salud dental puede derivar en enfermedades cardiovasculares y otras patologías.
Por otro lado, el 11% de la población catalana ha renunciado a recibir terapia con un psicólogo por los elevados costes. Esta cifra refleja la situación de muchas personas que padecen problemas de salud mental y que no pueden acceder a una atención adecuada por falta de recursos. La salud mental es un tema que sigue siendo tabú en la sociedad española y la falta de cobertura en el sistema sanitario público no hace más que empeorar la situación.
Ante esta realidad, Oxfam exige al gobierno español que tome medidas urgentes para garantizar la accesibilidad a los servicios sanitarios para todos los ciudadanos. Una de sus propuestas es elevar el gasto sanitario hasta al menos el nivel de la media europea, lo que supondría una inversión adicional de 6.400 millones de euros en Cataluña.
Además, la organización llama a las autoridades a adoptar políticas que prioricen a las personas más vulnerables, como las personas mayores, los desempleados y los inmigrantes, y a eliminar los copagos sanitarios que dificultan el acceso a la atención médica.
Por otro lado, también es necesario trabajar en la sensibilización sobre la importancia de la salud dental y en la eliminación de barreras económicas para acceder a los tratamientos dentales. Una buena salud bucal es fundamental para una buena salud general y no debe quedar relegada a un segundo plano por motivos económicos.
En definitiva, el informe de Oxfam revela la realidad que viven a diario muchos ciudadanos españoles: la falta de acceso a servicios médicos básicos debido a la precariedad económica. Las autoridades deben tomar medidas urgentes para garantizar una atención sanitaria equitativa para todos, especialmente para las personas más vulnerables. La salud es un derecho universal y no debe estar condicionada por la situación económica de cada individuo.