Los niños son los más propensos a temer la visita al dentista. Pueden ser más sensibles al sonido de los instrumentos, la forma de la camilla y las luces que el profesional utiliza sobre su cabeza.
Pero acudir al dentista es imprescindible para mantener los dientes sanos y fomentar unos buenos hábitos de higiene bucal.
Si tu hijo es de los que le tienen miedo al dentista, hoy te vamos a dar algunos consejos que te serán de gran utilidad.
Aquí hay algunos consejos útiles:
- Debe predicar con el ejemplo. Que tú, como padre, vayas al dentista y te sientas seguro y tranquilo es fundamental para empezar.
- También evite decir que cualquiera de estas frases puede dañar la tranquilidad del niño. No «se te caerán los dientes si no vas al dentista».
- Lleva siempre contigo un peluche o un muñeco, el juguete al que el niño está más apegado.
- Tenga paciencia para comprender que ir al dentista es algo nuevo para su hijo.
- Haga una cita de ajuste, en la que no se verá al niño, pero conocerá la oficina y conocerá la ubicación y el personal.
- Si visitas al dentista desde que eras un bebé, la temer nunca existirá, porque será algo rutinario durante su crecimiento.